Con los perritos no

Por Diana Alarcón Elizondo
X: @dianapat23

Hace unos días, el Museo Tamayo de Arte Contemporáneo en la Ciudad de México, inauguró la exposición “Casts” de la artista danesa Nina Beier, y que a tan solo un par de días de haberse presentado causó polémica en redes sociales, debido al uso de perros para desarrolar el performance “Tragedy 2011”, y que fue publicado por una Tiktoker que asistió al evento inaugural

En dicho video se ven a varios perritos acostados sobre alfombras “persas”, haciéndose los muertos. En la publicación de la influencer, comenta que esta “actuación perruna” solo se llevaba a cabo ciertos días de la semana en horarios específicos. Las tomas (para mi gusto) fueron malísimas porque se les ve a los perritos con unos ojos de angustia, y con un collar de castigo.

“La acción de alguna manera se siente como un hechizo que congela todo en la habitación. Es un momento extraño en el que el perro parece estar momificado o disecado y luego se levanta de nuevo y la ilusión se rompe”, comentó previamente la artista en una entrevista a un medio de comunicación

Después de publicado, una internauta se hizo presente a través de X (antes Twitter), hablando de la violación a los derechos de los animales dictadas en el Articulo 10 de la Ley del Bienestar Animal, una de las principales disposiciones es que prohíbe el uso de animales en espectáculos públicos, lo que incluye circos, exhibiciones y cualquier evento en el que los animales sean usados para entretener.

Ante esto, la Secretaría de Cultura pidió a directivos del Museo Tamayo que dejaran de llevar a cabo dicho acto, a lo que autoridades de este museo, comentaron de que esto no sucedería. Fue cuando el caso se viralizó a nivel nacional, que decidieron dejar de presentarlo.

Luego de todas estas denuncias, la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial (PAOT), llevó a cabo una investigación, haciendo que el INBAL (la red de museos que forman parte del Instituto Nacional de Bellas Artes), se comprometa a nunca volver a utilizar animales para exposiciones, firmando incluso un compromiso para no volver a repetirlo ni en esta, y en ninguna otra de sus exposiciones.

Por otro lado, aunque en su momento el Museo Tamayo y el INBAL trataron de dar a entender que el performance se había realizado de manera correcta, de acuerdo con la PAOT, se pudo constatar que la organización no contaba con el permiso que necesita cualquier persona para llevar a cabo una exposición con animales. Es decir, se violó la Ley de Protección y Bienestar de los Animales de la Ciudad de México.

Desde entonces tanto autoridades del gobierno y del Museo Tamayo se han “aventado la bolita”, en quién tuvo la culpa y quién no, el caso es que no terminamos de entender, el por qué les hayan dado permiso de presentarlo. Lo más preocupante es que este video se pudo ver “gracias” al contenido de esta influencer que fue invitada a la premier de esta exposición, me pregunto ¿por qué medios, ella y los demás invitados no cuestionaron el acto? Solo por los likes, cuando el contenido o el periodismo ya no tiene la mayor importancia.

Cinco días después de que había pasado todo este embrollo, el Museo Tamayo salió a decir al mundo, que los perritos utilizados no sufrieron ningún daño.

Ya veremos en los próximos días cual es la multa que tendrá tanto el INBAL como el Museo Tamayo, y ahora si, estoy segura de que se sentará un precedente para que casos como este, no vuelvan a suceder, ya que formas de impulsar el arte hay muchas.

¡Nos leemos en la próxima columna si Dios, la inspiración, pero sobre todo si mi editor que ya debe andar viendo si adopta otro perrito en su vida, me lo permiten!