Entre tecnología, cerámica y un monje budista: la historia de la marca Kyocera
Por Armando Enríquez Vázquez
Twitter: @cernicalo
Una de las principales empresas tecnológicas nació en Kioto con tan sólo 28 empleados y hoy tiene más de 78 mil y su fundador es hoy un monje budista. Esta es la historia de la marca Kyocera.
La ciudad de Kagoshima se encuentra en el extremo sur de la isla de Kyushu, que a su vez es la que se encuentra ubicada más al sur entre las cinco principales islas del archipiélago japonés y es la capital de la prefectura del mismo nombre, en esa pequeña ciudad nació el 30 de enero de 1932 Kazuo Inamori. Inamori fue una más de las víctimas de la II Guerra Mundial cuando en 1945 su casa fue destruida en un bombardeo aliado, a pesar de ello Kazuo Inamori terminó sus estudios secundarios y en 1951 entró a la Universidad de Kagoshima, estudió en la facultad de Ingeniería y se especializó en el programa de Química Aplicada.
Como alumno destacado, la empresa Shofu Industries, dedicada a la fabricación de aislantes le ofreció empleo un poco antes de que Kazuo se graduará y al hacerlo en 1955 se incorporó a la empresa.
En 1956, Kazuo Inamori se conviertió en el primer japones en sintetizar materiales cerámicos a partir de un metal llamado Forsterita. Los materiales cerámicos se llaman así por ser creados a partir de tierras o metales y su nombre hace referencia al término clásico de cerámica que es la creación de diferentes instrumentos que utilizamos los seres humanos a partir de barro. Estos materiales cerámicos tienen una gran demanda en la actualidad por sus innumerables usos en casi todos los campos y áreas que necesitan de aislantes especializados para circuitos, o materiales para diferentes instrumentos y herramientas.
Este éxito, así como diferencias opuestas en la visión a futuro de la empresa llevaron a Inamori a renunciar a Shofu y con el soporte económico de su supervisor en Shofu y dos amigos de él, Inamori fundó en 1959 en Kioto; Kyoto Ceramics Co.,Ltd. Con 28 empleados se dedicó a fabricar aislantes cerámicos. El primer gran producto de la empresa se llama Kelcima que se ha convertido en uno de los materiales básicos para diferentes industrias.
En 1960, Kyoto Ceramics abrió sus oficinas en Tokio y para 1962 Inamori viajó a Estados Unidos. Ese mismo año, gracias al aumento de pedidos, Kyoto Ceramics inauguró su planta en la prefectura de Shiga, en esta nueva planta se impulsó un nuevo método de producción que hasta la fecha es base de la administración al interior de Kyocera y que Inamori bautizó como Sistema de administración Amiba y que consiste en la creación de pequeñas unidades de trabajo con independencia en sus decisiones para cumplir con tres objetivos principales: Incrementar la producción neta de la unidad, minimizar los gastos y tres; maximizar las horas de trabajo para minimizar las horas de trabajo.
En 1966, Kyoto Ceramics recibió por parte de IBM un pedido importante de productos cerámicos para sus circuitos integrados, la observancia en tiempo, forma, cumpliendo con los estrictos estándares del entonces gigante y líder de las computadoras de este pedido, fue un gran paso en el reconocimiento internacional. Pronto Kyoto Ceramics comenzó a innovar y crear mejores productos cerámicos para la nueva tecnología que iniciaba su crecimiento; computadoras.
En 1968, a Kyoto Ceramics se le otorgó el premio nacional de Japón para la mejor pequeña y mediana empresa. Ese mismo año se estableció la primera oficina de Kyoto Ceramics en Estados Unidos, en el estado de California y en 1971 una subsidiaria fue abierta en Alemania en el año que marca la entrada de la compañía a la bolsa de valores japonesa. A finales de la década de los setenta comienza a expandirse como empresa al invertir en otras empresas del sector, incluida la adquisición de la empresa Cybernet Electronics Co. En esa década también se inauguró en Kagoshima, la ciudad natal de Kazuo Inamori, el Centro de Investigación de Kyoto Ceramics.
Las décadas de los ochenta y noventa fueron de expansión y desarrollo para Kyoto Ceramics; en 1982 con la adquisición de cuatro subsidiarias, el nombre es legal y formalmente cambiado de Kyoto Ceramics Co. Ltd a Grupo Kyocera. En la actualidad Kyocera produce superconductores, paneles solares, cerámica decorativa, productos para las telecomunicaciones inalámbricas, componentes ópticos, equipo y aparatos médicos, equipos periféricos para computación,
teléfonos celulares, impresoras, y hasta implemento de cocina. El Grupo Kyocera cuenta con 308 empresas y a partir de diferentes tipos de materiales cerámicos Kyocera ha creado más de 200 productos diferentes.
En 1997, Kazuo Inamori renunció a su puesto como Chairman de Kyocera y de la otra empresa que fundó en los ochenta llamada DDI, para convertirse en monje budista. En 2010 fue nombrado Presidente de la aerolínea japonesa JAL, anteriormente Japan Air Lines para reestructurar y hacer redituable a la empresa, puesto que desempeñó hasta 2013 y desde 2015 se convirtió en consejero honorario de la aerolínea.
Kazuo Inamori ha escrito varios libros, incluyendo una que explica su proyecto de administración y que se llama Administración Amiba. Kazuo Inamori tiene 90 años de edad y Kyocera la empresa que fundó 63.