El veto de la prensa tapatía para Alejandro Fernández

Por Diana Alarcón Elizondo
Twitter: @dianapat23

La semana pasada al cantante mexicano Alejandro Fernández le costó caro el desprecio que le hizo a la prensa de Guadalajara, su estado natal. Ante ello y cansados de los constantes desplantes que muchos periodistas describen a lo largo del tiempo, el gremio de la entidad se unió en su contra y decidió no dar cobertura al palenque de las Fiestas de Octubre en Guadalajara, Jalisco el pasado fin de semana.

A diferencia de otros artistas que para promover sus conciertos, charlan con la prensa previo a sus shows, el manager de Alejandro Fernández anunció que el cantante no atendería a los medios, como ha sucedido desde el 2021.

A través de un comunicado, los 14 medios unidos como TV Azteca, Televisa, Imagen Televisión, Telemundo, Univisión y TVyNovelas, así como Milenio y Radio Fórmula entre muchos otros, informaron que en las próximas presentaciones del cantante en dicho estado, no se presentarán a cubrir los espectáculos debido a que el “Potrillo” se ha negado en repetidas ocasiones a darles entrevistas, influenciado también por su equipo de prensa y Relaciones Públicas.

En este documento explicaron que llegaron a un acuerdo de no hacer mención, debido al desinterés que él y su gente han mostrado a su labor periodística. La actitud de Alejandro Fernández ha sido duramente criticada por los periodistas de Guadalajara, quienes señalan que solo recurre a ellos cuando quiere hacerse promoción, y los desprecia cuando intentan tratar otros temas.

Aquí es el punto al que quiero llegar, y no me pondré del lado de nadie. Aquí cada uno de ellos tiene razón, pero el mal manejo que se le da a la situación es lo que realmente importa. Varios medios (sobre todo de espectáculos) les hacen unas preguntas a los artistas, muchas veces llenas de morbo o amarillismo, con tal de sacarles una declaración (ponerle a veces de su cosecha), y comenzar la polémica para llegar a los miles de vistas, clics y ventas.

¿En dónde dice que la prensa tiene que meterse y destrozar las vidas de los artistas? ¿Cuántos casos no hemos sabido sobre divorcios, escándalos y hasta muertes generadas por la misma prensa? La prensa argumenta que los mismos famosos son los culpables porque ellos son quienes “les abren la puerta”. Hace poco hablábamos del acoso de los paparazzis a la princesa Diana de Gales, quién después de perseguirla por todo Paris, el auto en el que venía chocó, provocando la muerte de ella y de su pareja.

Sé que a tooooodos nos encanta el chisme, amamos meternos en la vida de los demás, pero ya hagámoslo con medida. Cuando esto se ha convertido en un negocio, la misma prensa no deja de meter el dedo en la llaga haciéndoles mil preguntas y una y otra y otra vez, hasta hacer explotar a los famosos, y de ahí agarrarse para sacar la “exclusiva”. ¿A eso se le llama periodismo ahora?

Lo que tratan de comunicar o hacer artistas como Alejandro Fernández y muchos otros, es tratar de hacer lo mismo que hacemos los que nos dedicamos a hacer Relaciones Públicas empresariales, es simplemente comunicar el trabajo del artista y no meterse más allá de lo que diga un boletín de prensa, punto.

Yo no conozco a los publirrelacionistas de Fernández, pero me queda claro que ellos y que muchos de los que andan pululando por ahí saben de modos, de estrategia o de cómo se maneja el negocio. A la prensa hay que adularla, tratarla bonito porque esto del chacaleo y de las preguntas incómodas es parte de su trabajo y nunca se va a terminar. Hay que estar “a las vivas” porque no sabemos cómo y qué momento va a saltar la liebre.

Retomando el punto, es un hecho de que sea el sector que sea, es necesario tener un conocimiento ante casos de manejo de crisis preparado todo el tiempo. Hace unos días en un evento, vi cuando dos o tres periodistas se estaban deschongando por una mascara de Blue Demon y un destapador, también compórtense. Y por el lado de mis colegas, este fin de semana vi con mis propios ojitos el trato que se le dio a la prensa en la Arena Ciudad de México, peor que celadores de Santa Martha Acatitla.

Yo creo que esta guerra por la información debe de terminar, y debe de comenzar a verse un respeto por ambas partes, calidad de información (nos vale saber qué desayunó Paquita o si a Fulanito le encanta “el delicioso” en las mañanas. Aquí todos seremos beneficiados y hasta en la mente de las masas podría comenzar a verse un cambio positivo. Aquí todos ganamos: el medio que se va contento con su información, el artista o el vocero con la información que quería dar a conocer, y nosotros los espectadores que podemos estar enterados sin haber visto polémicas de por medio. Sueno aburrida, lo sé, pero un día de estos las fórmulas del amarillismo se deberían de terminar. Y sí, esta situación no cambia, “vendrán cosas peores”, así que es momento de trabajar e conjunto por un bien común.

¡Nos leemos en la próxima columna si Dios, la inspiración, pero sobre todo si mi editor que es fanático del Potrillo me lo permiten!