¿Ya sabes que es el ecobranding?

Por Diana Alarcón Elizondo
Twitter: @dianapat23

Ayer 5 de junio se celebró el Día Mundial del Medio Ambiente, una fecha para concientizar a los habitantes del mundo sobre el cuidado del planeta y el deterioro que año con año le estamos causando. Cada vez sentimos más los estragos de la tierra. Si pensaron que estaban en la premeno o en la meno o posmeno, tal vez se equivoquen, estos calores que hemos vivido (por lo menos en México) son a causa del calentamiento global.

En el marco de esta conmemoración, se deben centrar los esfuerzos en motivar a las personas y comunidades, para que se conviertan en agentes activos del desarrollo sostenible y de protección del medio ambiente. Cada año se elige un tema central relacionado con el medio ambiente, para conmemorar esta fecha, y en este 2022 se decidió nombrarlo “Una Sola Tierra”.

Con ello se pretende visibilizar la emergencia que afronta nuestro planeta referida al clima, evidenciando el acelerado calentamiento global y la escasa capacidad de adaptación de las personas y la naturaleza.Esta campaña se orienta a concienciar sobre tales problemáticas, fomentando la protección y restauración de nuestro planeta mediante la ejecución de diversas acciones, lo que implica la transformación de las sociedades y economías globales hacia la inclusión, justicia y respeto con la naturaleza.

La sostenibilidad y la preocupación por el medio ambiente son dos aspectos muy importantes que cada vez están más presentes en el día a día de las marcas y los consumidores. Estudios recientes concluyen que los consumidores cada vez están más conscientes con la huella que se va dejando en la naturaleza y optan por comprar a marcas que sean eco responsables. Eso ha hecho que esté en auge una tendencia: el ecobranding.

El ecobranding consiste en construir e identificar una marca con valores que apuesten por el respeto al medio ambiente y los derechos humanos.  Así, la sostenibilidad se convierte en el punto clave de toda la actividad que desarrolla la empresa. Aunque son muchas las que afirman comportarse de forma respetuosa, al final, realmente son pocas los que lo hacen de una forma veraz y consciente.

O, al menos, esa era la realidad, porque los beneficios que están demostrándose cuando se toma esta filosofía corporativa están convenciendo a muchas marcas para dar el paso real hacia políticas más sostenibles. Estas acaban desembocando en un valor añadido, una reducción de costos, un incremento de calidad o una eficacia y eficiencia que repercute en dos puntos de verdadero interés: mejorar el posicionamiento y, con ello, incrementar las ventas.

Pero no se trata solo de hablar de “dientes para afuera”, hay que actuar y ser congruentes. Las marcas que se dicen sustentables lo tienen que hacer hacia sus audiencias externas, pero también al interior de la compañía. Estas tendrán que imprimir papeles cada vez menos o hacerlo de forma ecológica, evitar tantos viajes, uso de gasolina, en fin…mil cosas de las que tal vez aún no nos damos cuenta que le afectan al planeta, o le benefician con acciones tan sencillas como dividir la basura entre orgánica e inorgánica, etc.

A veces, no basta con ser sostenible, o ahora que estamos comenzando con el ya conocidísimo “Mes del Orgullo” hay que ser siempre ecológico, sustentable, empático e inclusivo, no solo usar estas fechas como estrategia mercadológica. Nada como un compromiso ante la sociedad, nosotros mismos, nuestras familias, nuestro trabajo y nuestro planeta.

¡Nos leemos en la próxima columna si Dios, la inspiración, pero sobre todo si mi editor que debe andar súper ocupado dividiendo la basura entre orgánica e inorgánica me lo permiten!00

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