Nipon y Nishikawa, el mestizaje de las marcas de botanas

Por Armando Enríquez Vázquez
Twitter: @cernicalo

La tradicional bolsita con una geisha encierra una de las marcas de botanas favoritas de los mexicanos, hay dos que dicen ser la primera y una historia que parece desmentir a ambas.

El cacahuate japonés es un invento chilango que nació al combinar los mexicanos cacahuates con la cocina japonesa y esta mezcla conquistó al país. Existen muchas marcas que producen este tipo de botanas incluso las grandes empresas de botanas en México; Sabritas bajo la marca Mafer y Barcel bajo las marcas Golden Nuts y Kiyakis, lo ofrecen al consumidor. Pero al parecer el invento no están mexicano como aseguran.

Existen dos marcas que se dicen las creadoras del cacahuate japonés; Nishikawa y Nipón. Para la mayoría de los cronistas y porque al parecer fue la primera productora como tal de los cacahuates en la capital, el invento se debe a Yoshigei Nakatani, un migrante japonés que vivía en el centro de la Ciudad de México y trabajaba en los almacenes El Nuevo Japón, que era la competencia directa de los aun existentes Palacio de Hierro y El Puerto de Liverpool, antes de la II Guerra Mundial.

Con el bombardeo de Pearl Harbor y el tratamiento especial y discriminatorio de japoneses en Estados Unidos y México, la vida de la pequeña colonia japonesa en nuestro país se vio afectada de manera drástica. El dueño de El Nuevo Japón había enviado a México a su yerno, un hombre llamado Heiji Kato, a administrar la tienda. Con la entrada de Estados Unidos a la Guerra y las presiones sobre el gobierno mexicano. Kato fue detenido y extraditado a Estados Unidos con cargos de espionaje, después en 1942 fue canjeado por prisioneros estadounidenses y mexicanos en el país del sol naciente. Yoshigei Nakatani quedó sin empleó, estaba casado con una mexicana, Ema Ávila, y se vio obligado a crear una fuente de ingresos propia, recordó entonces una golosina tradicional de Japón llamada Oranda que de acuerdo con la página oficial de Nipón es una especie de muégano que al parecer tiene un origen verdadero en Korea, de cualquier manera, tras el éxito del producto, Nakatani se dedicó a crear una masa con harina de trigo y salsa soya con la que recubrió a los cacahuates y esta botana se volvió un éxito, primero entre los vecinos y colonias aledañas a su domicilio y poco a poco la demanda creció lo que obligó a Nakatani a producir una mayor cantidad de su cacahuate para abastecer tiendas de abarrotes cercanas y puestos del mercado de La Merced. Nakatani al ver crecer la producción y decidió establecer una pequeña fábrica cuya maquinaria diseñada por él, encargó a herreros conocidos de la colonia.

En la década de los años cincuenta decide darle nombre a sus cacachuates, le encarga a una de sus hijas un dibujo de una geisha y como marca le pone a su producto Nipón, en referencia a su origen japonés. Me da la impresión que nadie asesoró a Nakatani pues otras marcas que surgieron con el tiempo utilizaron imágenes de Geisha con los mismos tonos de azul que los utilizados durante décadas por Nipón.

Fue hasta 1972 que Nipón comandada por uno de los hijos de Yoshigei, Armando, estableció una producción industrial del cacahuate y los muéganos en una fábrica en la zona de Iztapalapa en la Ciudad de México. Para 1975, Nipón producía más de 340 toneladas de cacahuate japonés entre los que eran para la venta a granel y aquellos que se empacaban en bolsas de la marca que eran dos terceras partes de la producción Para la década de los 80 Armando y su hermana Graciela habían sustituido el liderazgo de su padre y dirigían la empresa Yoshigei Nakatani murió el 9 de septiembre de 1992.

La familia Nakatani, no fue la única en desarrollar los cacahuates japoneses, pero tuvieron la fortuna de estar establecidos en la Ciudad de México y por lo tanto después de la entrada de Estados Unidos a la guerra no se vieron obligados a mudarse como sucedió con las familias japonesas en otras partes del país, sobre todo en el norte donde se alejó a la colonia japonesa de la frontera y de esta manera evitar la llegada de posibles espías y tropas japonesas a Estados Unidos. En Mexicali, Tenzo Nishikawaga que había llegado a México en 1928 y su esposa también de origen japonés y que había llegado a Mexicali dos años después, fueron de los desplazados por el gobierno mexicano. La familia Nishikawaga llegó a vivir en Zumpango en el Estado de México a unos terrenos que el líder de la comunidad japonesa Sanshiro Matsumoto, fundador de la florería Matsumoto, ofreció para los desplazados.

De acuerdo con el sitio de Internet de la marca, Nishikawa al terminar la II Guerra Mundial se estableció en la Ciudad de México y después de dedicarse a diferentes oficios aprovechó una receta que le había enviado un amigo en Brasil para crear los cacahuates japoneses. Nishikawa comienza a vender sus cacahuates en 1957, cuando Nipón ya realizaba ventas y además de manera que podría parecer sospechosa utilizó una bolsa azul con una geisha para empacar sus cacahuates. Nishikawa en su sitio de Internet se proclama como la primera marca en ser registrada ante las autoridades del país, así como la marca creadora del diseño de la bolsa, lo que por otro lado explicaría porque con el paso de los años Nipón cambio su imagen corporativa por el sol naciente en la O de Nipón, aunque conserva el busto de la geisha.

Nishikawa continúa siendo una empresa familiar, mientras que Nipón fue vendida en 2017 a la división de Totis de La Costeña. Lo cierto es que ambas historias se contraponen y contradicen como sucede muchas veces con marcas que son competencia. Al parecer ni Nishikawa, como tampoco Nakatani realmente inventaron el cacahuate japonés. En su blog, el escritor Aurelio Asiain (1) menciona la fabricación en Japón de una botana tradicional y centenaria que consiste en diferentes semillas recubiertas por una masa de harina de arroz con diferentes tipos de sazonadores y adornos en su superficie llamado Mamegashi, que a diferencia de la historia de los Oranda, está muy documentada, ejemplo de lo anterior es este otro blog en inglés (2) donde se describe más a los Mamegashi contemporáneos demostrando que sin duda son el origen del mestizaje que dio lugar al cacahuate japonés y que sustituyó por la existencia de la materia prima a la harina de arroz, por harina de trigo.

(1) https://aurelioasiain.com/2012/04/02/los-cacahuates-japoneses-son-japoneses/
(2) https://angelinahue.com/2018/03/27/traditional-japanese-nuts-mamegashi-kyoto-mamemasa/

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